Sobre mi, como tomé

la desición de viajar

y como lo hice...

Contexto

 

Recuerdo que hace unos años, uno de mis sueños era viajar por el mundo, tenía unos 14-16 años pero en ese entonces yo “tenía que” ir a la universidad y ser alguien la vida así que después de 10 años y hacer eso que la gente dice que hay que hacer para ser feliz, pero ¿que crees? decidí hacer mi mochila e ir a recorrer mi propio país, México.  

Ahora con 26 años veo que existen muchas posibilidades para cumplir mis sueños, hay personas que llevan viajando por años y al igual que yo comencé por esas ganas de conocer el mundo, sin una ruta definitiva o tal vez sí pero con cambios en tiempo y formas de viajar, puedo ver a cientos de viajeros que van recorriendo con solo una mochila con muchas ilusiones por dentro, muchos mensajes por compartir, que al verlos dan una y mil razones de seguir explorando y de que tu también puedes cumplir tus sueños.

Couchsurfing ¿Por qué México?

 

¿Cómo pagas tus viajes? Pero ¿Cómo pagas el vuelo, donde duermes, cómo pagas el autobús? Esas y más eran las preguntas que le hacía a  Ramsés cada que me contaba sobre sus viajes por el mundo, yo lo escuchaba incrédula a lo que estaba diciendo, él siempre con su actitud súper relajada me decía “si tú vas con la mejor vibra de viajar todo se te va a dar, todo” pero yo seguía sin creerlo.      

Me contó sobre una App para viajeros llamada Couchsurfing en la que puedes encontrar viajeros, eventos y un “surfer” que te puede dar alojamiento gratis en su casa, yo seguía de incrédula mientras me contaba sus experiencias en esta App. 

Decidí descargarla y crear un perfil, ahora debería hacer amigos en la comunidad de Couchsurfing para adentrarme en el mundo de los viajeros, por lo que mi primer amigo fue Elijah, la primera vez que platiqué con él mi mente explotó, es sumamente inteligente y muy gracioso

Poco después conocí algunos viajeros, algunos de Austria, Alemania, Argentina, República Checa, Polonia, Holanda, Uruguay, y poco más. Siempre que platicaba con ellos me contaban sobre lugares increíbles, playas hermosas y comida deliciosa que habían encontrado aquí en México, siempre hablando de lo hermoso que es el país y su gente, me di cuenta de que ellos podían ver y reconocer lo que hace único a México pero que para mí es normal porque yo lo veo todos los días, fue así como decidí que quería conocer mi propio país, recorrer las hermosas playas del Caribe Mexicano que tanto escuchó, bailar en las comparsas en Oaxaca y nadar en los cenotes de Cancún.   

 

 

 

Un trabajo soñado

 

Para poder hacer el viaje, pagar mis gastos y sobrevivir yo quería un trabajo que fuera online, que pudiera trabajar desde cualquier parte del mundo con solo tener internet, recuerdo que en esa fecha yo trabajé en un restaurante y esperaba en la manera de tener ese trabajo, inventar algo o aplicar para un puesto, venia pensando todo el tiempo sobre cómo sería tener un trabajo así.

En esa semana me dediqué a buscar en un sitio de trabajos y di con uno que literalmente trabajaba desde tu celular, leí la vacante y aplique para una entrevista, el trabajo era real ya trabajar para una empresa de televisión por internet, solo necesita internet y un celular, yo estaba incrédula jaja hace meses que lo anhelaba y ahora tenía ese trabajo que tanto quería. Teniendo esa ventaja comenzar a planear todo era cuestión de tiempo y paciencia.

Investigue sobre las formas de viajar y una de esas es hacer voluntarios, donde ofrece unas horas de trabajo a la semana a cambio de hospedaje, alimentos y otros beneficios dependiendo del programa, puede ser en un hostal, una granja, un centro holístico, un camping, escuelas, comunidades, existen miles de programas con experiencias únicas. Debes pagar una membresía para poder acceder a los programas, enviar una solicitud con tus motivos del por qué quieres hacer un voluntario, elegir las fechas y el tiempo que te gustaría estar en dicho lugar, generalmente haces una entrevista con el anfitrión y si ambos están de acuerdo, confirman tu estancia. Antes de hacer todo este proceso investigue sobre la plataforma, vi reseñas, verifique los datos, organice mis tiempos para tener una fecha tentativa para salir de Puebla.  

Seguía conociendo personas a través de Couchsurfing pero cuando conocí a Alejandro no sabía que tan importante sería para mí, recuerdo que vi su viaje publicado en la app, el estaría en Puebla, leí su perfil, estaba super interesado en conocerlo, él escribió un libro sobre sus viajes, llevaba tantos años viajando que de inmediato le escribí un mensaje para conocerlo y mostrarle la ciudad.

Nos reunimos en el zócalo de Puebla, lo hice esperar unos minutos pero valió la pena, de inmediato lo reconocí, nos vimos como si nos conocieramos de años, traía su guitarra y su libro por supuesto, nos saludamos, nos dimos un abrazo y empezamos a platicar, recuerdo que le hice tantas preguntas que él no dejaba de hablar jaja fuimos a cenar antojitos poblanos cerca del centro, pedimos diferentes para probar de todos, 

Después de ese día nos seguimos viendo unas veces más hasta que llegó el momento de despedirnos, él iría hacia el norte hasta llegar a Baja California Sur haciendo rait, yo no lo creía, yo quería leer su libro y resulta que me regaló uno con una dedicatoria super linda.

Le conté sobre el viaje que quería hacer, el me dio muchos consejos, siempre me alentó para hacerlo, me decía que todo se iba a dar conforme iba avanzando, que iba aprender muchas cosas en el viaje ya conocer gente super buena onda, Alejandro realmente fue importante para mi en ese momento en que senti que todo saldria bien y seria una experiencia increible, yo queria viajar como el lo hacia. 

 

DÍAS PREVIOS

 

Antes de iniciar mi viaje, hice una lista de lo que me llevaría, poco a poco organicé todo, hice algunas compras, también terminé trámites de la universidad, cuando estaba guardando todas mis cosas me di cuenta de lo mucho que tengo, cosas que nunca usé ni usaré, también tire cosas a la basura, si no las use durante años en el futuro menos. Aproveche para estar en casa de mi mamá y pasar tiempo con ella antes de irme.

Me reuní con mis amigos, no pude despedirme de todos pero si disfruté el tiempo con ellos al máximo, sabiendo que en unos días me iría; la última noche en Puebla me quedé en casa de mi buena amiga Rebeca, a ella la conocí en la universidad pero tiempo despues dejo de ir, asi que yo iba a su casa para platicar, algunas veces me quedó en su casa, siempre ha sido muy buena conmigo. Me despedí de ella, de su novio y de los perritos que tienen. Ese fue mi último día en Puebla.



 

También quiero mencionar que tuve una lesión en la espalda, yo creía que nunca podría cargar una mochila de 15 kilos, durante un tiempo fui a varias terapias distintas pero nadie me dio una solución hasta que fui una terapia con Ángel, él me ayudó muchísimo.

 Recuerdo que me pregunto mis metas y yo respondí “solo necesito poder cargar una mochila de 15 kilos para poder irme” el me dijo que era posible, yo solo quería saber en qué tiempo por qué yo saldría en unos meses y el me dijo tranquilamente y súper animado que si era posible.

Las terapias fueron buenísimas, cada terapia me sintió más fuerte y pudo ver el avance en mi cuerpo, Ángel siempre me apoyó y me alentaba en cada sesión, lo que me dio más ánimos para seguir hasta que llegó el día de despedirme de él. Ángel me dio un regalo que me serviría mucho para el viaje.

Esto lo menciono porque hay veces que creemos que no podremos hacer algo por que se atraviesa un percanse pero si te esfuerzas puedes lograr superar cualquier situación. 

*

Mis últimos días en Puebla me gustó mucho, sabía que iba a extrañar mi vida, mis lugares favoritos, los paseos que daba por la noche en el zócalo y más que nada mis amigos pero sabía que quería conocer y explorar lugares nuevos. 



27 de agosto de 2022

 

Ese día hice la mochila, me despedí y tomé el autobús hacia Tapachula, Chiapas. Mi mamá y mi hermana fueron a dejarme en el autobús.  

 Llegue a Puebla, compre mi boleto y espere a la salida ya que me esperaban 17 horas de camino, viajaría de noche así que eso lo hacía menos cansado.

 En ningún momento sentí miedo de irme, al contrario, sentí adrenalina y mucha emoción.

Cargué mi celular, tomé un café y espere a que anuncien mi salida. Recuerdo perfectamente esa sensación, dónde estás lista para nuevas aventuras, nuevos paisajes, nuevas experiencias pero sobre todo hacer lo que te gusta, cuando finalmente llega el momento que tanto querías, está sucediendo en ese instante y lo único que debes hacer es disfrutar y agradecer dónde estás. 

Anunciaron mi salida, fui al andén donde saldría el autobús, entregue mi boleto y tome mi asiento, no había alguien junto a mí así que sería mejor para mi, en la noche me recosté a lo largo de los dos asientos y fue la manera en la que pude dormir un poco.

Después de muchos kilómetros amanecí en Chiapas, así de fácil y rápido. Mire hacia la ventana y wow estaba en medio de la selva, literal, había tanta vegetación, por todas partes, nunca había visto tanta vegetación, unas montañas enormes, palmeras, árboles enormes, yo quedé impresionada ante la naturaleza de Chiapas.